El New York Post asegura que la actriz Carrie Fisher, conocida por su papel como Princesa Leia en la saga Star Wars, ha recaído en su adicción a las drogas, y las compra y consume compulsivamente.
El diario americano afirma que Carrie ha estado comprando estupefacientes en un apartamento de Los Ángeles en repetidas ocasiones. Por lo visto este piso de compra de drogas está situado en un barrio peligroso de la ciudad, muy alejado del glamour hollywoodiense y hasta allí se desplaza la estrella para consumir las sustancias.
De hecho, la noticia relata que Carrie llega en su coche justo delante del apartamento, alguien baja y, tras charlar 30 segundos (supuestamente intercambiando la droga por el dinero) la actriz se marcha y así en más de siete ocasiones. Tras la conversación fugaz con el tipo, Carrie se iba directamente a su casa.
Sus problemas con las drogas ya habían salido previamente a la luz, pero Fisher había conseguido recuperarse y, tras rehabilitación, estar ‘limpia’. Ahora, por lo visto, ha caído de nuevo en el infierno de la dependencia y cada vez que entra al apartamento, o ya dentro de su coche tras volver de allí, se comporta de una forma errática.
Según el periodista que ha sacado a la luz esta información, la artista mueve la cabeza arriba y debajo constantemente y sin sentido alguno, aprieta sus puños y se limpia compulsivamente la nariz de un modo que no es para nada natural.
Carrie, sin embargo, niega haber recaído en sus fantasmas pasados y cuando la prensa le preguntó, tras su séptima sospechosa visita al mismo punto, Fisher lo negó con toda la calma del mundo diciendo: “No querida, sólo he vivido aquí muchos años”, pero, ¿qué tiene que ver eso con visitas de 30 segundos dentro del coche? La verdad es que da que pensar… esperemos que no sea así y Carrie esté sana y en plena forma para la nueva entrega de Star Wars en la que participará. Fuente: Yahoo