El número de personas que han fallecido a causa del paso del ciclón tropical ‘Sandy’ por Estados Unidos ha ascendido a 97, lo que sitúa en 167 el balance de víctimas del temporal en todo el continente americano.
El recuento oficial ha aumentado después de que las autoridades de Nueva York elevaran a 48 la cifra de fallecidos, tras el hallazgo de nuevos cadáveres en Staten Island, entre ellos los de dos niños de dos y cuatro años de edad, y de que las de Nueva Jersey situaran el dato en 13.
De las 36 víctimas mortales restantes en Estados Unidos, once se han registrado en Maryland, otras tantas en Pensilvania, seis en Virginia Occidental, cuatro en Connecticut, dos en Virginia y dos en Carolina del Norte.
A los 97 muertos en Estados Unidos hay que sumar los 67 que se ha cobrado el temporal en el Caribe —54 Haití, el país más afectado de la región, once en Cuba, uno en Jamaica y otro en Bahamas—, y los dos que hay en Canadá, lo que hace un total de 167.
Ayudas de emergencia
La ciudad de Nueva York informó este viernes sobre un programa de préstamos de emergencia y de la exoneración de impuestos a la venta para ayudar a la recuperación de pequeños y medianos negocios afectados por el paso del ciclón «Sandy».
Las autoridades de EE UU trabajan contrarreloj para restablecer la electricidad y los servicios básicos en la costa Este, donde casi cinco millones de personas están todavía sin luz a solo cinco días de la cita con las urnas.
‘Sandy’ apagó las casas y los negocios de más de 8 millones de usuarios a lo largo de 15 estados y el Distrito capitalino de Columbia, pero las compañías eléctricas trabajan para que la cifra llegue a cero lo antes posible.
En la costa del estado de Nueva Jersey, donde el huracán tocó tierra el pasado lunes, algunas ciudades fueron evacuadas por mandato estatal, y sus habitantes no comenzaron a regresar a sus casas hasta la tarde del jueves.
A su regreso se encontraron los estragos que el agua, el viento y la arena del mar habían causado en sus propiedades. «Nada será igual. Será diferente porque muchos de los iconos que hacían que fuese lo que era ya no están y han sido arrastrados por el océano», afirmó Chris Christie, gobernador de Nueva Jersey, quien recorrió la zona ayer con el presidente estadounidense, Barack Obama, para evaluar los daños. Fuente