A pesar de que la tecnología híbrida
ya no sorprende a nadie, el SR1 tiene características que le hacen
único. De hecho, su modo de propulsión se aplicará en modelos que ya
están en el mercado, como el 3008, que
podría tener su versión híbrida
durante el 2011.
El resultado de 313 cv proviene de la
combinación de un motor de gasolina 1.6 THP (de 218 CV) con otro
eléctrico situado en la parte trasera (95 cv). Esta potencia se
reparte a las cuatro ruedas, que además, son directrices. El
funcionamiento de esta dirección es muy similar al de otros modelos
en el mercado: el ángulo de giro de
las ruedas traseras varía en función de la velocidad, es
decir, cuanto más rápido menos cantidad de giro y viceversa.
Como era de esperar, Peugeot ha
creado el SR1 con un modo de
conducción totalmente limpio. La marca no asegura durante
cuantos kilómetros se puede circular en modo eléctrico, pero sí ha
adelantado que se puede y que el consumo combinado de combustible es
de 4,9 litros. A su vez, el nivel de emisiones queda por debajo de
los 120 gramos de CO2 por kilómetro, con lo que entra sin problemas
en la categoría de ecológicos.
Cosa de tres
El SR1 no es un coupé al uso, sino un
punto intermedio entre un biplaza y
un descapotable con banqueta trasera para varios ocupantes.
La capacidad de este prototipo es de 3 personas, dejando un solo
asiento en la parte central trasera al que sea accede deslizando
hacia delante la consola central. Una vez dentro, el cuadro de
instrumentación, situado detrás del volante deportivo, mezcla los
formatos analógicos y digitales. Hay elementos que no se habían
visto hasta la fecha en un automóvil, como
indicadores de cristal verticales
para el consumo y autonomía o un espacio destinado al reloj
de pulsera
Bell&Ross del propietario.
La terminación es, como era de
esperar, muy futurista, y en ella
destacan el cuero liso combinado con maderas nobles y
algunos materiales extravagantes como el níquel bruto o los cromados
satinados. Muy fino, desde luego.