Con este decálogo, el CEF pretende
puntualizar aquellos errores que en materia económica deben evitar
las empresas en momentos de recesión.
Por su parte, Juan José Pintado,
profesor de Finanzas del CEF, señaló que el panorama y las
expectativas económicas han empeorado drásticamente de forma muy
acelerada. “En estos momentos en los que proliferan las amenazas y
retos para las empresas, debemos destacar que los aspectos de mayor
gravedad tienen que ver con la liquidez y las diversas necesidades
de financiación”, explicó.
Diez cosas que no debe hacer una
empresa en tiempos de crisis
1. Negar el impacto de la crisis:
Incluso en el caso de empresas que aparentemente todavía no se han
visto afectadas por la crisis, y aunque sólo sea en aspectos
parciales, la crisis acabará afectando a casi todas las compañías
del país.
2. No extremar la cautela: Las
empresas no deben descuidar ni sus ingresos, ni sus gastos. Es
importante seguir muy de cerca la evolución del mercado y de las
ventas.
3. Descuidar la comunicación: El
silencio total puede ser tan negativo como una indiscriminada
emisión de información.
4. No ponderar los costes e ingresos
para cada escenario: Se han de diseñar distintas categorías de
posibles acciones, replanteando los objetivos para intentar
minimizar las posibles consecuencias negativas de la crisis.
5. ‘Pasar’ de los presupuestos y del
endeudamiento: Es preciso ajustar la cuenta de resultados prevista
sobre los gastos de la empresa. La existencia de pérdidas, en
particular en el caso de las multinacionales, aumenta el peligro de
cierre empresarial.
6. Descuidar la delegación de
decisiones: Frente a la incertidumbre reinante, muchas decisiones
anteriormente delegadas o automatizadas, deben de ser examinadas y,
quizás, recentralizadas de nuevo.
7. Continuar ’sin más’ los proyectos
e inversiones en curso: Es preciso reconsiderar los proyectos en
marcha o previstos, manteniendo en el congelador aquellos que no
vayan a mejorar a corto plazo los resultados o la facturación.
8. Desatender los posibles cambios
del mercado: Cuanto más rápida sea la respuesta de la empresa frente
a los cambios del mercado, mejor se podrán planificar las
estrategias que permitan restablecer el negocio.
9. Sobre reaccionar: Vivimos una
situación delicada, por lo que no se deben tomar decisiones
apresuradas. Se debe imponer la templanza.
10. No prever los posibles escenarios
una vez superada la crisis: Existe un después de la crisis y hay que
pensar en él.