Los máximos responsables de Interior de los Gobiernos central y
vasco han estudiado en Leioa
(Bizkaia) la situación de ETA desde que anunciara el cese
de su actividad terrorista y además han rubricado un acuerdo de
colaboración para crear el Centro
Memorial para las Víctimas del Terrorismo.
Tras el encuentro, que se ha celebrado en el
Palacio Artaza del Gobierno Vasco,
el ministro ha explicado ante los medios que las informaciones que
tienen los responsables de la lucha contra ETA evidencian que los
miembros de la banda "están haciendo movimientos en la
clandestinidad". Por ello, ha destacado la
"contradicción" de que
"ETA anuncie el cese de su actividad pero siga activa". Ha
considerado que su ministerio tiene "muy buena información" gracias
a la colaboración con Francia y a los servicios de inteligencia
españoles que ha calificado de "magníficos" y gracias a ellos, el
Gobierno "sabe perfectamente cual es la situación" de la
organización en estos momentos.
Fernández Díaz ha reiterado que ETA
ha pedido en "cuestaciones
navideñas" dinero para financiar al colectivo de presos y,
"mientras exista ETA, esas peticiones no son respondidas desde la
libertad", aunque ha diferenciado este hecho de la extorsión que
practicaba antes la banda. "Como ETA sigue existiendo, el Estado
seguirá actuando" hasta lograr su desaparición, ha señalado al
tiempo que ha lanzado "un mensaje de esperanza" y ha destacado el
Gobierno de España y el vasco van "a ser un solo brazo en la lucha
contra ETA".
Ha asegurado que "la sociedad va a
ganar esta batalla" por la labor realizada "desde la
lealtad institucional y manteniendo la unidad de los partidos
democráticos", para actuar "con firmeza" desde el Estado español y
en "colaboración intensísima con Francia". Ha destacado la
coincidencia "básica y esencial" entre el Gobierno y el ejecutivo
vasco en las medidas adoptar contra ETA, y ha restado importancia
"ínfimas diferencias" que se han plasmado, por ejemplo, respecto a
la política penitenciaria.
Rodolfo Ares
El consejero vasco del Interior, Rodolfo Ares, ha instado al
Gobierno a iniciar el acercamiento
de presos de ETA y la excarcelación de los reclusos
enfermos, y el ministro ha respondido que "si ETA dejara de existir
definitivamente, podrán acogerse a los beneficios penitenciarios que
ya existen en el marco de la actual legislación penitenciaria",
porque hasta ahora ha sido la propia organización la que impedía a
sus reclusos solicitar ese tipo de medidas. A su juicio, "el mayor
enemigo de los presos de ETA es ETA" ya que
esos reclusos "no tienen libertad
para acogerse a unos beneficios" y ha asegurado que "es imposible"
la aplicación de medidas colectivas o amnistías.
En cualquier caso, el consejero vasco ha indicado que sobre
política penitencia profundizarán el presidente Mariano Rajoy y el
lehendakari en su próxima cita. Rodolfo Ares ha explicado que "de la
información de que disponemos" su departamento ha deducido que
no es probable que la banda "vaya
volver a acometer actividades terroristas" como atentados
contra personas o extorsión a empresarios, por lo que ha justificado
que se vaya a ir reduciendo la protección a los amenazados.
El ministro ha concretado que la decisión de
reducir los escoltas se
toma sobre "la conjunción de las dos realidades" del anuncio del
cese de actividad de ETA y la crisis económica, que obliga "al
Gobierno de España a unas limitaciones presupuestarias
extraordinarias" pero siempre, ha matizado, "desde la reversibilidad
de la protección cuando fuera preciso". Se van a "racionalizar los
recursos" y a plantear las medidas de protección "individualizadas"
si bien, ha dicho, "no somos ingenuos y vamos a seguir vigilantes"
hasta que ETA desaparezca.