Pero en diciembre tengo la
posibilidad de dejar de jugar. Después seguiré en el club
como ayudante del presidente Suleiman Kerimov, porque tengo con él
un contrato de por vida".
Así pues, y tras muchos rumores, el defensa confirma su marcha
como jugador. "Sí, lo dejo. Ha
llegado el momento de colgar las botas. Son muchos años ya
los que llevo como jugador. Yo creo que mi cuerpo empieza a no
aguantar más tanto trabajo físico, tantos viajes, tantos hoteles...
Llevo 17 años jugando como profesional, pero veintidós en total
corriendo por los campos".
En consecuencia, el brasileño asegura que "sí,
es mi último año".