Quince de estos contribuyentes le adeudan al Estado
más de 100 millones de euros cada
uno, otros 15 deben entre 50 y 100 millones cada uno,
mientras que 246 están entrampados con entre 10 y 50 millones de
euros.
Poniendo en evidencia a estos evasores y gracias a confiscaciones
y la venta en subastas de bienes en propiedad de estas personas, el
Gobierno griego de unidad nacional espera
reducir el elevado déficit público
del Estado.
Sin embargo, numerosas personas que figuran en esta lista, de 170
páginas, ya se han declarado en
quiebra o se encuentran en la
cárcel, precisamente por
fraude fiscal, recuerda este lunes el diario Eleftheros Typos.
Según el ministro de Finanzas griego, Evangelos Venizelos, que
venía amenazando desde noviembre con hacerla pública, se trata de la
"lista de la vergüenza", que pone en evidencia uno de los
principales males de la
sociedad griega, el impago de
impuestos.
Los más evasores
El primero del listado es Nicos
Kasimatis, un empresario de 57 años de edad, cercano al
partido conservador Nueva Democracia, con una deuda de 952 millones
de euros, está detenido desde 2009, condenado a 504 años de cárcel
por
evasión y fraude fiscal.
Kasimatis coordinaba en Salónica (norte del país) una
red clandestina de empresas e
inspectores de Hacienda para evadir y defraudar impuestos.
El empresario entregó al juez los nombres de los inspectores
corruptos que colaboraban con él, pero según la prensa griega, estos
siguen en sus cargos hasta la actualidad.
Otros que aparecen en el listado son el exjugador de baloncesto
ruso Michail Misunov,
quien debe 600.000 euros, y Yorgos
Batatudis, antiguo propietario del club de fútbol PAOK
Salónica, quien adeuda 2,5 millones de euros al fisco griego.