Y es que las duras declaraciones que Kiko Hernández grabó a los
padres de Campanario causaron un caos en el plató de
Sálvame.
Las presentas amigas se acusaron mutuamente de “mentirosas”,
“manipuladoras” y “malas personas”. Pero rectificar es de sabios
dicen. La primera en confesar su dolor por la pelea y el
distanciamiento con su amiga fue
Belén Esteban.
“Yo siempre he ido con mi verdad y nunca he necesitado que me
defienda nadie. Me fui muy dolida, y sé que yo también hablé,
pero dijeron cosas que yo no soy. Me encantaría no llorar, pero
lloro. Yo no soy peligrosa, y si algún compañero piensa eso de
mí me duele en el alma, porque ayer me sentí fatal, porque si
realmente ellos tres que siempre están conmigo piensan eso de
mí, aparte de todo lo que haya pasado, me duele, porque no soy
peligrosa”.
Entonces entró en la controversia el tercero en discordia, Kiko
Hernández. “No os dais cuenta que lo que lo que los padres de
Campanario han hecho ha sido enfrentarnos, han dicho vamos a
soltar mierda y que se maten entre ellos, así a nosotros nos
dejan en paz’, y eso es lo que está pasando”.
Mila Ximénez
se mostró de acuerdo con su compañero y aseguró que lo que en
realidad había sucedido es que todos habían entrado al juego de
los padres de Campanario. “Hay un interés de fuera en
enfrentarnos, y somos tan imbéciles que entramos en la trampa de
ese
juego. Por supuesto que me arrepiento de muchas cosas que dije”.
Una vez hechas las confesiones,
Belén Esteban y
Mila Ximénez, con lágrimas en los ojos finiquitaron el
tema con un cariñoso abrazo y un beso, que no dejaba dudas de la
íntima amistad que existe entre ellas.
Asunto zanjado con
Mila Ximénez,
de nuevo los colaboradores de
Sálvame
hicieron piña, pero para terminar
Belén Esteban
mandó un mensaje a María José Campanario. “Yo en mi programa no
tengo ninguna fuerza, aunque mis compañeros digan que sí. Quiero
decir a una persona que es muy protagonista de esta historia que
yo no tengo la fuerza para decir que si hablan de mí les despide
mi productora, y si te lo han contado, María José Campanario, yo
en directo te digo que no. Yo soy la que más marrones de mi vida
me como aquí, pero te lo juro, no tengo ninguna fuerza, te juro
que es mentira”. Fuente