¿Internet Explorer
más seguro que Firefox?
Esta polémica
pregunta, formulada desde la presentación del navegador del proyecto
Mozilla, ha tenido también desde entonces numerosas respuestas en
uno u otro sentido, pero estos últimos días han visto la luz
diversos documentos que aportan más leña al fuego de la polémica
El
de la seguridad es uno de los campos del mundo de la informática que
actualmente está acaparando la mayor parte de la atención de la
industria y los usuarios. En un contexto como el que tenemos
actualmente en que una Internet medianamente segura facilita el
trabajo de spammers, virii (programadores de virus), crackers y
otras amenazas diversas, no es un tema trivial la seguridad del
browser web que elijamos para navegar por la Red. Opera, Safari,
Konqueror... son nombres más o menos familiares, pero que por una u
otra razón no compiten o no pueden competir en igualdad de
condiciones con el navegador líder indiscutible, el Internet
Explorer de Microsoft.
El único navegador web con suficiente proyección entre los usuarios
y cuota de mercado para hacerle frente con posibilidades al Internet
Explorer, es Firefox de la fundación Mozilla y heredero indirecto
del antiguo Netscape. Estando así las cosas, es lógico que la
discusión sobre la seguridad comparada de ambos programas no sea
asunto trivial.
Desde el principio, Firefox publicitó su mayor seguridad como una de
sus principales bazas para ganar usuarios, frente a los numerosos
problemas y agujeros de seguridad que presentaba el Internet
Explorer. No obstante, la afirmación de un Firefox más seguro frente
al Internet Explorer ha quedado en entredicho estos últimos meses
con un reguero de avisos de agujeros de seguridad que, según algunas
fuentes, ha superado al número de fallos encontrados en el navegador
de Microsoft.
Pese a todo, la seguridad que proporciona un navegador web no
solamente viene marcada por el número de agujeros que le son
descubiertos, si no también por la posibilidad de explotarlos en un
entorno real. Por ejemplo, si se descubre un fallo en un navegador
web que para explotarlo debe tenerse acceso a la máquina física
donde está instalado y que es imposible hacerlo a través de
Internet, dicho agujero tendrá a la práctica pocas consecuencias.
Los llamados exploits son los programas que aprovechan los agujeros
de seguridad para realizar acciones perniciosas como ejecución de
código arbitrario o escalada de privilegios. Realmente lo más
importante es la existencia de estos exploits, lo rápidamente que se
diseminan por la Red y con que rapidez se corrige el error que
aprovechan. Y en esto, y según algunas estadísticas, Internet
Explorer aventaja a Firefox con menos exploits circulando por la
Red. Además debemos contar también con una cantidad variable de
exploits que aprovechan fallos no conocidos públicamente, y que son
de circulación limitada en ciertos círculos de Internet.
Como era de esperar, la publicación de estas estadísticas ha
provocado revuelo y un aluvión de críticas contra las cuales se han
tenido que defender sus autores explicando el método en el que se
han basado para llevar a cabo sus informes.
El último caso de esta polémica ha sido provocado por un artículo
publicado recientemente en ZDnet
ADELANTOS DEL NUEVO EXPLORER 7
NAVEGADORES DE INTERNET EN ESPAÑA
Fuente
Compartir este articulo : | | | | | |
|