"Blogger"
y "blogomanía" son algunas de las palabras que comienzan a
popularizarse con este nueva moda. Aparecen en la prensa y se están
convirtiendo en parte del lenguaje corriente.
El único problema es que muchos de los que oyen este vocablo,
llegado con la revolución cibernética, no saben de qué se está
hablando.
"Blog", un término definido como sitio en internet que contiene
diarios personales en línea con reflexiones, comentarios y a menudo
enlaces a otros sitios, ha sido seleccionada como la palabra
estrella del año 2004 por la editorial Merriam-Webster.
La compañía, que tiene un diccionario que se puede consultar por
internet, la incluirá en su edición impresa este año después de ser
buscada por decenas de miles de internautas en la versión
informática.
La palabra es un abreviatura de "weblog", procedente de "web" (internet)
y "log" (diario); los "bloggers" son los autores de estos diarios,
que no hay que confundir con los lectores, los usuarios de internet.
Un estudio reciente, desarrollado por el "Pew Internet and
American Life Project", una iniciativa cuyo objetivo es medir el
impacto social de internet, indica un crecimiento considerable en
Estados Unidos de esta afición a escribir y leer en esos espacios,
cuyos temas van desde cuestiones sobre animales domésticos a debates
políticos.
Durante la invasión de Irak, en 2003, muchos usuarios de internet,
incluidos periodistas, encontraron en estos diarios personales una
forma de dar rienda suelta a sus ideas, y escapar de la versión
"oficial" que diarios y televisiones daban del conflicto.
El año pasado, las elecciones presidenciales en Estados Unidos
fueron un buen tirón para la creatividad "blogística", especialmente
durante la Convención Demócrata en Boston, que facilitó pases a los
"bloggers" para dar su versión del debate, con tal éxito que algunos
medios de comunicación optaron por crear sus propios "blogs".
Un 7 por ciento de los 120 millones de adultos que viven en EEUU
y usan internet dicen haber creado un "blog", lo que representa 8
millones de personas, y el 27 por ciento de los usuarios de internet
dice leer "blogs", es decir, que 32 millones de estadounidenses son
lectores de esos diarios.
Los creadores de diarios personales en internet son en su mayoría
hombres (el 57 por ciento) y jóvenes (un 48 por ciento es menor de
30 años), y usan conexión de banda ancha (el 70 por ciento).
El estudio destaca otras características predominantes: son
veteranos en el uso de la red (82 por ciento lleva al menos seis
años), con una situación financiera cómoda (el 42 por ciento vive en
hogares con ingresos de más de 50.000 dólares anuales) y un alto
nivel de educación (el 39 por ciento han completado estudios
secundarios o universitarios).
Ese es también el perfil de los lectores de esos diarios, aunque
en el último año se ha detectado un crecimiento de la afición entre
las mujeres, las minorías, las personas de entre 30 y 49 años, y los
que se conectan mediante línea telefónica.
Pese a esa aparente popularidad, solo un 38 por ciento de los
usuarios de internet dice tener idea de lo que significa el término
"blog" y un 62 por ciento confiesa no saber de qué le hablan.
El crecimiento de los "blog" ha favorecido además un nuevo
mecanismo de distribución de noticias e información: los agregadores
"RSS", un programa informático que recoge la información desde
sitios de internet que actualizan regularmente sus contenidos y "blogs"
para llevarlos directamente al ordenador del usuario