Hollande consiguió algo más de
18 millones de votos, 1,3 millones de sufragios más que
Sarkozy, según los datos publicados este lunes por el Ministerio del
Interior. Contados los votos de los franceses que viven en el
extranjero, la ventaja del candidato socialista se redujo algo con
respecto a los datos anunciados anoche.
Sarkozy se impuso en el exterior
con el 53,05% de los votos de los algo más de los 450.000 votantes
que ejercieron su derecho fuera de Francia. En total, el candidato
conservador reunió 16.869.371
de sufragios, algo más que dos millones de votos menos de los que en
2007 le permitieron conquistar el Elíseo. Hollande tuvo 18.000.438
votos, casi un millón menos que los logrados hace cinco años por
Sarkozy.
En total, se registraron algo
más de 2 millones de votos blancos o nulos, una opción que
había solicitado la candidata ultraderechista Marine Le Pen.
Segundo presidente socialista de la República
Hollande, de 57 años, se convierte así en el
séptimo presidente de la V
República francesa y el segundo socialista, tras
François Mitterrand,
que desempeñó la jefatura del Estado entre 1981 y 1995. Al cierre de
los colegios electorales, Hollande se encontraba en la localidad de
Tulle (centro-sur de Francia), en la que votó antes de viajar a
París.
La tercera en las preferencias de los franceses, la
ultraderechista Marine Le Pen, líder del
Frente Nacional (FN), que protagonizó un fuerte ascenso
en la primera vuelta, anunció por su parte el pasado 1 de mayo que
votaría en blanco y expresó su rechazo a los dos candidatos. Le Pen
no dio consigna de voto a sus seguidores y desde entonces el
presidente Sarkozy protagonizó una serie de declaraciones de
aproximación a los votantes del FN.
Ambos candidatos protagonizaron el pasado 2 de mayo el único debate
televisado en directo, en el que durante casi tres horas hablaron
sobre sus propuestas, centradas sobre todo en los aspectos
económicos de sus programas. El entorno de Hollande indicó que el
socialista podría hablar esta misma noche con la canciller federal
alemana, Angela Merkel, con quien mantiene diferencias de fondo
respecto a la política de
austeridad presupuestaria aprobada en la Unión Europea.
Hollande ha insistido durante su campaña en que
pretende renegociar el
tratado que 25 de los 27 Estados de la UE firmaron a principios de
año con el fin de introducir medidas de estímulo del crecimiento
económico como complemento a las que exigen el rigor fiscal.
"Dimensión de crecimiento"
Hollande, subrayó, tras conocerse su victoria, su intención de
dar una dimensión de crecimiento y de empleo a la construcción
europea, y que piensa hablar de eso "lo más pronto posible" con los
otros países de la UEy en
particular con Alemania. "Mi misión es dar a la
construcción europea una dimensión de crecimiento, de empleo, de
prosperidad, de futuro y es lo que diré lo más pronto posible a
nuestros socios europeos y en primer lugar a Alemania", dijo
Hollande.
Y eso, "en nombre de la amistad que nos une y de la
responsabilidad común",
señaló en su primer discurso tras conocerse los resultados de los
comicios. Dijo, desde su feudo electoral de Tulle, en el centro de
Francia, ser consciente de que
"Europa nos mira" y estar "seguro de que en muchos países
europeos (su victoria) ha sido un alivio, una esperanza" porque "la
austeridad no podía ser una fatalidad".
El nuevo presidente dijo que su victoria este domingo
significa "un cambio para Europa", donde sus pueblos
"esperan terminar con la austeridad".
Hollande, que durante toda su campaña reiteró su intención de
reformar el tratado europeo negociado a finales del pasado año y
firmado a comienzos de marzo para añadir medidas en favor de la
reactivación económica y a ese respecto se mostró convencido de que
la jornada de este domingo "debe
ser un nuevo punto de partida para Europa".
Alta participación
El índice de abstención
en la segunda ronda de los comicios presidenciales alcanzó el
18,97%, según el ministerio. En la
segunda vuelta de las presidenciales anteriores, disputadas
en 2007 entre el conservador Nicolas Sarkozy y la socialista
Ségolène Royal, registró un 75,11% de participación.
El candidato más madrugador ha sido Hollande, que votó sobre las
11 de la mañana en Tulle —centro-sur de Francia— una pequeña
localidad de la que fue alcalde, y lo hizo acompañado de su pareja,
Valérie Trierweiler y rodeado de numerosos periodistas y cámaras.
Una hora más tarde, sobre las 11.50 h, el actual presidente,
Sarkozy, ejercía su derecho a voro en el Liceo Jean de la Fontaine,
del distrito XVI de París, adonde llegó junto con su esposa, Carla
Bruni. Ni Sarkozy ni Hollande hicieron declaraciones a la prensa y
ambos se dedicaron a saludar a
otros electores que estaban en ese momento en sus
respectivos colegios electorales.