El agravamiento de la enfermedad del patriarca de la familia
vasca que emparentó con la Casa Real se produjo casi de forma
paralela al surgimiento del escándalo que afecta todavía a su
hijo, el antaño deportista modelo que ahora se enfrenta a serias
imputaciones judiciales. Poco se sabe del grado de conocimiento
que ha tenido estos meses el padre de las noticias que los
medios han publicado sobre las actividades de Iñaki, pero es una
evidencia en Vitoria que la familia ha sufrido por partida
doble.
Juan María Urdangarin nació en Zumárraga y estuvo
ligado buena parte de su vida a la industria química, en
particular a la firma Fuchs, trabajo que le llevó a residir en
Barcelona hasta 1980, cuando se instaló en Vitoria para formar
parte de la empresa como consejero delegado. Urdangarin encontró
en Vitoria una ciudad amable y sencilla donde instalarse y ver
crecer a sus siete hijos que le han dado 25 nietos.
De raíces nacionalistas, el padre del Duque de Palma fue
elegido por el PNV para liderar la Caja Vital a mediados de los
90, cargo que desempeñó hasta el año 2000 no con pocas
dificultades. Tuvo fuertes enfrentamientos con los
representantes de los trabajadores y también con algunos
sectores de su propio partido, que le d
ejaron
solo cuando tuvo una agria polémica con el exalcalde peneuvista
de Vitoria, José Ángel Cuerda.
Relación
con la Casa Real
En su relación con la Casa Real, Urdangarin siempre se
refirió con palabras de amabilidad al Rey, la Reina y el
Príncipe de Asturias, pero con especial cariño hacia Doña Sofía
y Don Felipe. Siempre destacó “las facilidades que da la Familia
Real, que hace las cosas muy llevaderas y agradables. Son
normales y hay que comportarse con ellos como gente normal, nada
más”, dijo en una ocasión. Sobre el Príncipe de Asturias,
Urdangarin dejó dicho que «es encantador, muy sencillo. Una
buena persona. Creo que tendrá éxito». Sobre la Reina, «a la que
estimo muchísimo”, que “también es una gran persona" que
«siempre» les ha hecho «las cosas agradables y fáciles». También
sobre Doña Letizia trasladó buenas impresiones.
La salud de Juan Mariaha sido muy delicada en los últimos
meses, tanto que pese a la "recomendación" de La Zarzuela de no
pisar suelo español, Iñaki se ha "escapado" alguna vez a ver al
hombre al que llamaba después de cada partido de balonmano, el
que trató de inculcarle los valores cristianos en la misa del
domingo de los Marianistas, el colegio donde estudió tercero de
BUP y COU. La última de esas escapadas tuvo lugar el pasado
martes, cuando voló a Bilbao para acudir al domicilio familiar,
un piso amplio pero sin lujos en una buena zona residencial de
la capital alavesa. Fuente
