El matrimonio de Antonio Banderas y Melanie Griffith pende de un
hilo. Eso es al menos lo que
asegura la revista National Enquirer, que tacha al
protagonista de El Zorro de adúltero y a su mujer de celosa
enfermiza.
El español y la norteamericana llevan quince años felizmente
casad
os
y son padres de una adolescente, Stella del Carmen. Hasta ahora,
siempre se habían mostrado como una pareja idílica, pero ya no se
dejan ver juntos tan a menudo.
Las fotografías que muestran a Griffith comprando flores sin su
anillo de casada, que recoge el portal Radar Online, han
disparado todas las alarmas.
"Melanie es experta en divorcios poco amistosos. Pero divorciarse de
Antonio sería lo peor. Hay mucho dinero en juego y está hecha un
lío. No solo podría perder el amor de su vida, sino que además su
carrera está estancada", desvelaba una fuente.
La rubia se ha divorciado anteriormente de dos hombres: Steven
Bauer y Don Johnson. La hemeroteca demuestra que con ambos mantuvo
sonados litigios y, hasta que se cruzó en su camino Banderas, la
estabilidad para ella era una quimera.
Gracias al malagueño, Melanie también ha superado su adicción a
las drogas y al alcohol. El miedo a perder a su hombre le forzó a
recibir tratamiento en varias clínicas de rehabilitación.
Banderas se encuentra actualmente en España rodando Los
amantes pasajeros a las órdenes de su gran amigo Pedro
Almodóvar. De momento, se niega a dar declaraciones sobre su vida
privada. Últimamente solo se ha limitado a decir: "He
tratado a muchas mujeres, muchas de ellas muy guapas, pero la única
rubia que me interesa es mi chica, Melanie".