Josep Guardiola reconoció el sábado antes de jugar con el
Atlético que el tema de su renovación era "cansino". Lo hizo horas
después de que se publicase que el Inter haya realizado una oferta
de 20 millones de euros para que se haga cargo del equipo junto con
el resto de sus colaboradores.
Massimo Moratti estaría dispuesto a pagarle esa cifra
multimillonaria, según publicó Marca, para que supla a Claudio
Ranieri. El Inter, que fue campeón de Europa hace sólo dos años y
conquistó cinco Ligas de Italia seguidas entre 2006 y 2010, pero
está en una crisis de identidad y genera dudas en su campeonato y en
Europa, pese a que está en octavos de Champions.
Sin embargo, Guardiola, quien ganó ocho títulos desde que asumió
en 2008 en Barcelona, no estaría dispuesto a aceptar por el momento
ninguna oferta, ya que aún tiene que darle una respuesta a su club
al respecto de su continuidad, mientras que trascendió que de no
seguir en el conjunto catalán se tomaría un año "sabático".
Por tal motivo, `Pep`, le habría dado orden a su representante,
José María Orobitg, para que no hable con ningún club en este
período, más allá de la cantidad de millones que le ofrezcan.
Los curiosos 20 millones
Curiosamente el 26 de enero se supo que el otro entrenador más
mediático del mundo, José Mourinho, tiene firmada con el Real Madrid
una claúsula de penalización por incumplimiento de contrato, que
asciende a 20 millones de euros según informa AS, en caso de que
alguna de las dos partes rescinda el acuerdo firmando en verano de
2010 y que finaliza el 30 de junio de 2014.
José Mourinho se fue cuando quiso de Inter y Oporto, algo que
inquietaba al Real Madrid cuando firmó al portugués, y por eso
señaló una apartado en el que se recoge que tendría que pagar 20
millones de euros al Madrid si decide abandonar el equipo antes de
tiempo. Así lo
cuenta C.A. Forjanes en As y explica que la cifra corresponde a su
salario (diez millones netos por temporada) que se deduce de las dos
temporadas de contrato que el técnico portugués incumpliría si
abandonase la 'Casa Blanca'.
Si la situación fuese al contrario y fuese el Madrid el que
decidiera finiquitar el contrato, el club tendría que abonar esa
misma cantidad al luso. Una táctica habitual en las negociaciones de
Florentino Pérez, que ya firmó una cláusula similar en el preacuerdo
que firmó con Luis Figo, a través de José Veiga que por entonces era
el agente del entonces barcelonista. Esas son las condiciones que
firmaron en su día tanto el Madrid como Mourinho en el contrato que
les une desde 2010 hasta junio de 2014.
