Si se observan bien las imágenes de Catherine Zeta Jones, y concretamente su barriguita, la opción del embarazo cobraría fuerza. Sería el tercer hijo del matrimonio con Michael Douglas, aunque los peor pensados recuerdan el caso de Katy Perry, que cerró el debate sobre un posible embarazo al decir que su barriga era fruto de sus irresistibles e irrenunciables malos hábitos, alcohol y comida basura.
No parece ser el caso de Catherine Zeta Jones porque si la barriga que luce en las fotografías es fruto de una vida desordenada, la actriz tendría que reflexionar y pensar que en su día a día también debería incluir algo de ejercicio y una dieta más variada. De momento, los protagonistas de la historia, el matrimonio Douglas-Zeta Jones, no ha abierto la boca. Estaremos atentos. Fuente