TEHERÁN/BRUSELAS (Reuters) - Irán acusó el lunes a los europeos
de librar una "guerra psicológica" después de que la Unión Europea
prohibió las importaciones de petróleo iraní, sumándose a Estados
Unidos en una nueva ronda de medidas destinadas a impedir que
Teherán avance en su programa nuclear.
La república islámica, que niega estar buscando una bomba
atómica, criticó los esfuerzos por estrangular sus exportaciones,
mientras Asia se muestra dispuesta a comprar lo que Europa rechaza.
Algunos iraníes también renovaron las amenazas de impedir que el
petróleo árabe parta del golfo Pérsico y advirtieron que podrían
atacar blancos estadounidenses en todo el mundo si Washington emplea
la fuerza para evitar que Irán bloquee el estrecho de Ormuz, una vía
vital para las exportaciones de crudo.
Pero en las tres décadas de conflicto entre Teherán y Occidente,
la retórica belicosa y la poco fiable estrategia de las sanciones se
han vuelto tan comunes que el precio del crudo referencial Brent
subió poco menos de un 0,5 por ciento y eso se debió en parte a
factores monetarios no vinculados.
"Si ocurre cualquier interrupción en relación a la venta de
petróleo iraní, el estrecho de Ormuz definitivamente será cerrado",
dijo a la agencia Farsi Mohamad Kosari, vicepresidente del comité de
asuntos externos y seguridad nacional del Parlamento, un día después
de que barcos de Estados Unidos, Francia y Reino Unido navegaran por
el Golfo.
"Si Estados Unidos busca aventuras después del cierre del
estrecho de Ormuz, Irán hará al mundo inseguro para los
estadounidenses en el menor tiempo posible", agregó Kosari, en
referencia a una promesa previa de Estados Unidos de emplear su
flota para evitar un bloqueo.
El Gobierno del presidente Barack Obama aplaudió el lunes la
decisión de Europa de imponer nuevas sanciones, tras tomar sus
propias medidas contra el comercio de petróleo y el banco central
iraní el 31 de diciembre. Israel también celebró la noticia.
La prohibición europea a las importaciones de crudo y las medidas
de congelación de activos del banco central iraníes son "otro paso
importante en el esfuerzo internacional para aumentar dramáticamente
la presión sobre Irán", dijeron el secretario del Tesoro, Timothy
Geithner, y la secretaria de Estado, Hillary Clinton, en un
comunicado conjunto.
El Gobierno de Obama dijo que las sanciones de la UE fueron
consistentes con las medidas que Estados Unidos ha tomado contra
Irán.
Alemania, Francia y Reino Unido emplearon las sanciones como un
impulso para llamar a Teherán a renovar las suspendidas
negociaciones sobre su programa nuclear. Rusia y China, que critican
la estrategia occidental, dijeron que pronto podría haber
conversaciones.
Irán, sin embargo, aseguró que las sanciones disminuyen esa
probabilidad.
Dado que Grecia, Italia y otras debilitadas economías de Europa
dependen mucho del crudo iraní, los ministros de Exteriores de la
UE, reunidos en Bruselas, les dieron un período de gracia hasta el 1
de julio de 2012 para terminar con sus acuerdos existentes con la
república islámica.
Un miembro de la influyente Asamblea de Expertos de Irán, el ex
ministro de Inteligencia Ali Fallahian, dijo que Teherán podría
responder a las sanciones de la UE cesando inmediatamente las ventas
al grupo, dejando a sus miembros sin tiempo para hallar suministros
alternativos y dañando a sus economías con un alza de precios.
"La mejor opción es dejar de exportar petróleo antes de que
terminen estos seis meses y antes de la aplicación del plan",
declaró según la agencia de noticias semi-oficial Farsi.
GUERRA PSICOLÓGICA
"Las sanciones de la Unión Europea contra el petróleo iraní son
una guerra psicológica (...) Imponer sanciones económicas es ilógico
e injusto pero no impedirá que nuestra nación obtenga sus derechos",
dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores Ramin Mehmanparast
según la televisión estatal, en referencia a las ambiciones
nucleares de Teherán.
Por su parte, el viceministro de Exteriores Abas Araqchi dijo a
la agencia de noticias oficial IRNA que cuantas más sanciones se
impongan a Teherán por su trabajo de enriquecimiento de uranio, "más
obstáculos habrá para resolver el tema".
"Los países europeos y aquellos que están bajo presión deberían
pensar en sus propios intereses. Cualquier país que se prive del
mercado de energía de Irán pronto verá que ha sido reemplazado por
otros", agregó Mehmanparast.
China, el principal cliente de Irán, se ha resistido a la presión
de Estados Unidos para que reduzca las importaciones de petróleo, al
igual que otras economías asiáticas.
El ministro de Energía indio dijo el lunes que las sanciones
están obligando a Irán a vender más barato y que India aprovechará
esa oportunidad para comprar todo lo que pueda.
Los Gobiernos de la UE también acordaron congelar los activos del
banco central iraní y prohibir todo el comercio en oro y otros
metales preciosos con el organismo y otras entidades públicas,
dijeron funcionarios del bloque.
La jefa de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, que
representa a Occidente en las negociaciones por el programa nuclear,
dijo que quiere que las sanciones financieras convenzan a Teherán de
retomar el diálogo.
"Quiero que la presión de estas sanciones conduzca a
negociaciones", indicó a periodistas antes de la reunión de los
ministros.
"Quiero que Irán regrese a la mesa y retome todas las ideas que
dejamos en la mesa (...) el año pasado (...) o proponga ideas
propias", agregó.
Irán dijo hace poco estar dispuesta a dialogar con las potencias
occidentales, aunque hubo señales contradictorias acerca de si
existen las condiciones adecuadas para reiniciar el contacto.