La actriz Demi Moore no levanta cabeza. Ya han pasado más de dos
meses desde que anunciase su separación de Ashton Kutcher por las
infidelidades del joven actor, pero lejos de comenzar a recuperarse,
cada vez se encuentra más demacrada.
En su última aparición pública, un acto solidario en beneficio de
los damnificados por el terremoto de Haití, se la veía más delgada
que nunca. Al lado de su corpulenta
hija Rumer, la primera de las tres hijas que tuvo con el
actor Bruce Willis, Demi Moore se mostraba
muy desmejorada.
A pesar de recurrir a un vestido negro, que escondía su figura de
flashes demasiado incisivos, la
delgadez de sus piernas y brazos era más que evidente. Por
no hablar de su cara, donde los pómulos se ven cada vez más
marcados.
Demi Moore ya ha reconocido públicamente que no está atravesando
por su mejor momento: no solo por la muerte en diciembre de
su mejor amiga, Pattsy Rugg,
al mes de separarse de Ashton, sino por su creciente inseguridad
ante la posibilidad de volver a encontrar el amor. Y eso que se
rumorea que podría estar saliendo con un modelo más joven aún que
Ashton Kutcher.
Ya dijo en 'Harper's Bazaar' que ella misma se veía demasiado
delgada, pero no parece que consiga ponerle remedio de momento.
