Y este año el Aspire Football
Dreams de Qatar ha hecho triplete al proclamarse campeón en
las categories Juvenil,
Cadete e
Infantil. ¿Casualidad? Más
bien no. La Aspire, una academia establecida en
Doha forma verdaderos
deportistas de elite,
empezando por el fútbol. Lo conseguido en Cataluña es fruto de un
minucioso Trabajo. Qatar
será la sede del Mundial
de 2022 y para entonces
esperan tener en sus filas al futuro
Messi.
A la vista del talento
que sus jugadores han demostrado en el
MIC, dentro de 10 años
Qatar puede contar con una
selección muy a tener en
cuenta. Desde luego, en las tres
categorías se han visto jugadores de una gran
categoría. ¿De dónde sale
tanto talento? Simplemente se busca, y
Aspire sabe muy bien cómo
hacerlo desde hace años. Lo encuentra en muchos
lugares del planeta.
Aspire Football Dreams
es un fascinante proyecto de detección de las futuras
promesas del fútbol
mundial. Ofrece a miles de adolescentes la oportunidad de demostrar
su valor para poder llegar
a ser un día un futbolista profesional con un futuro
brillante. Y uno de los
que más mandan en este proyecto es un español. Se trata de
Josep Colomer, su Director
General. Ex Director del Fútbol Base del Barcelona, ideó y diseñó el
programa asumiendo el
liderazgo.
Este entrenador catalán tiene una
amplia red de ojeadores de
en muchos países de Asia, África y
América. Alguno de los técnicos de este proyecto puede
estar hoy en Senegal y
mañana en Costa Rica
observando jóvenes talentos listos para captar. O pasado en
Vietnam… Más de
750.000 jóvenes juegan
unos 60.000 partidos que se disputan en una media de
80 campos por país. Así de
complejo es el sistema se selección de talentos. Hasta
6.000 voluntarios están
involucrados en este enorme proyecto.
Los 15 países involucrados
en el Aspire Football Dreams son los siguientes: Guatemala,
Costa Rica y Paraguay
(América); Tailandia y
Vietnam (Asia); y Mali,
Senegal, Guinea,
Costa de Marfil, Ghana,
Tanzania, Kenia,
Nigeria, Gambia y
Uganda (África).
En una primera fase,
los jugadores inscritos jugarán partidos de 11 contra 11 de 25
minutos cada uno. Ellos serán supervisados por un
coordinador de campo, que
junto con sus colaboradores deberá elegir a los mejores jugadores
que pasarán a la segunda
fase. En esta, ya más importante, un grupo de expertos
‘scouts’ se trasladan a
los países para observar a los jóvenes jugadores y tendrán la
responsabilidad de elegir
a los mejores 50 de todos
los campos.
La tercera ya es la
definitiva. Los 50
seleccionados se desplazarán cuatro días a la capital del país y ahí
ya entrará en acción Josep Colomer,
que junto con sus colaboradores de la Aspire Academy elegirán a los
3 mejores. Los ganadores
se ganan el derecho a disputar la gran final en las espectaculares
instalaciones que esta
academia tiene en Doha.
Durante un mes serán
sometidos a unos exigentes entrenamientos y finalmente los
20 mejores de entre todos
los países tendrán la oportunidad de seguir su
formación en las Academia
Aspire para formarse como deportista
profesional.
Hasta ahí el proceso de
selección. ¿Y luego? Esta academia forma jugadores que
luego serán contratados
por los clubes de la liga qatarí. Una competición que poco a poco se
va llenando de extranjeros
ya reconocidos, pero también
talentos formados en la Aspire.
Aspire Football Dreams capta jugadores de entre
11 y 14 años. Les abre a
muchos jóvenes la puerta hacia un mundo
mejor, pues muchos de
ellos proceden de países
donde las condiciones de vida no son fáciles. Con el paso de los
años, y al ser captados tan jóvenes, los mejores pueden acogerse a
la nacionalidad
qatarí, y de esta manera
poder jugar con su selección nacional. En el
Mundial de 2022, seguro,
alguno de estos chicos que ha deslumbrado en la Costa brille en una
cita histórica para Qatar. Alguno podría ser el
sucesor de Messi…