Maníacos de la limpieza,
caprichosos, obsesionados con sus mascotas o, simplemente,
excéntricos, los famosos nos dejan curiosas anécdotas que,
en muchos casos, superan a la ficción. ¿Quieres conocerlas?
Te las contamos ¡en detalle!
Nos encantan los chicos que se preocupan por la limpieza pero lo
de Justin Timberlake roza
la obsesión. Nos hemos quedado de piedra al enterarnos de que el
guapo actor y cantante necesita que uno de sus asistentes desinfecte
los pomos de las puertas ¡cada dos horas!
Actriz, cantante, diseñadora,... conocemos muchas facetas de
Beyoncé, pero no sabíamos
que tras su perfecta belleza se esconde una maníaca de los gérmenes.
La americana exige en sus viajes de trabajo que su baño sea
desinfectado cada vez que lo utiliza y que se encuentre a una
temperatura exacta de 25 grados.
Otra celebrity nada convencional es el ex componente de
Take That,
Robbie Williams. Que tenga
ocho perros nos puede parecer hasta tierno, pero que le guste dormir
con todos en su cama... no, gracias.
Que Kate Moss sea
excéntrica no es algo nuevo, pero sus extravagancias nos siguen
sorprendiendo. En esta ocasión se trata de la extraña lista de
regalos que realizó para su boda. Entre los obsequios demandados la
modelo incluyó catorce ceniceros valorados en 280 euros cada uno y
una caja de su champagne preferido, Louis Roederer Cristal que
cuesta cada botella la frilera de 2.052 euros.
Suri Cruise es la
pequeña más consentida del star system, por eso no nos
parece tan extraño que capricho tras capricho haya conseguido juntar
una colección de zapatos de diseño valorada en nada más y nada menos
que 150 mil dólares.
Llegó al mundo de la música pisando fuerte y con una actitud nada
convencional. Quizás es por eso que no nos sorprende que
Kesha siga haciendo de las
suyas. ¿Su última ocurrencia? Tras recibir un diente como regalo por
parte de uno de sus múltiples fans, ha decidido pedir en
Twitter a sus seguidores
que le envíen sus piezas dentales para poder confeccionar un collar
con ellas. ¡Espeluznante!
Aunque en el armario de Jennifer
Lopez las prendas de múltiples colores abundan, cuando
viaja necesita rodearse de una atmósfera inmaculada. Habitaciones de
hoteles, backstage, trailers,... todo tiene que
estar adornado con objetos de color blanco. Flores, velas, sábanas,
sofás o paredes, ningún detalle puede ser de otro color.
Nadie pone en duda que Angelina
Jolie es una mami comprometida, que tiene tiempo
de colaborar con causas humanitarias a la vez que cuida de sus seis
pequeños. Sin embargo, su última táctica educativa no acaba de
convencernos. Aficionada confesa a la comida camboyana, Angelina ha
incluído en la dieta de sus hijos un alimento nada apetecible:
grillos. Y, aunque nos resulte desagradable, la actriz ha indicado
que tanto Pax como
Maddox se los comen como
si de doritos se tratase. ¡Qué desagradable!
Parece que la obsesión por las mascotas es muy habitual entre los
famosos. En este caso se trata de Jim Carrey. No, no nos referimos a
los pingüinos con los que comparte vivienda en su última película
(aunque dadas las circunstancias no resultaría tan sorprendente),
sino a su perro Hazel, al
que Carrey envía tres veces por semana a un masajista especializado
en terapias caninas antiestrés.
Mariah Carey es otra
obsesionada por el cuarto de baño. Cada vez que viaja, la cantante
exige que instalen un retrete nuevo y grifos de oro. Pero estas no
son sus únicas peticiones, la diva también demanda una cantidad
específica de agua mineral para que ella y su perro puedan bañarse
en ella, así como estar siempre rodeada de cachorros y gatitos.
Al igual que Kate, Lady Gaga
nos tiene acostumbrados a sus rarezas. Su última manía confesa es
que duerme con la ropa y el maquillaje con los que se atavía para
sus actuaciones. Lo que no llegamos a comprender es como puede
conciliar el sueño vestida con esos modelitos tan complicados.
Jennifer Hudson tiene
una voz que no deja indiferente pero tampoco lo hacen los caprichos
que exige cada vez que actúa. Cinco coches, un séquito de peluqueros
y maquilladores, seguridad personal y alitas de pollo para desayunar
son los elementos imprescindibles para que la diva haga aparición.
No nos extraña que algunas de sus actuaciones hayan tenido que ser
canceladas.
Aunque de la dulce Britney
Spears de los 90 solo nos quede su voz, su fama sigue
creciendo y sus discos liderando las listas de ventas. Eso sí, cada
vez que se encuentra de gira, Britney exige por adelantado ensaladas
de camarones y langostinos, bebidas energéticas, chicles, caramelos
y decenas de cajas de cereales.
Otra celebrity que exige demasiado cada vez que realiza
un viaje de trabajo es Christina
Aguilera. La cantante no se desplaza sin un séquito de
policías que la reciban en cada aeropuerto y la lleven en limusina
para poder evitar el tráfico.
Madonna es una veterana
en el mundo celebrity pero sus exigencias no son tan diferentes de
las de los demás famosos. Cada vez que hace una aparición, la
cantante tiene que estar rodeada de botellas de agua de Kabbalah y
si se va de gira exige un retrete nuevo cada día.